ADIOS DISOLUTO

…

EL CAMINO QUE NO LLEVA AL CIELO

El camino que no lleva al cielo

Es el de las horas perdidas

El de las horas postergadas

De horas rotas y fracturadas.

El camino que no lleva al cielo

es el del rendezvous pospuesto.

De la lenceria vuelta a guardar

Frustrada, en un cajon y sin usar.

El camino que no lleva al cielo,

Es el del labio deseoso y presto

Que empapado en sus deseos

Agoniza entre la sabanas; añejo.

El camino que no lleva al cielo

Es el directamente proporcional

A las esperas cotidianas

Que se mueren de esperar.

Y se que no conoces el cielo

Tus ojos me lo han dicho

Y se tambien, que no lo añoras

Pues jamas le has visto.

La carretera que lleva al cielo

Viaja en direccion opuesta a tu viaje

E intentas remontar el vuelo

Cual un ave sin plumaje.

gad.

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EL BLUES DE LA ESCLAVA

Ahora si ya es oficial; si necesito alejarme del escritorio para comer o en su defecto, defecar, necesito enviar por triplicado una solicitud a mi supervisor quien seguramente estará tan ocupado que la respuesta me llegara en un plazo extemporáneo, tardío e irreversible.

Yo se que han extrañado los debrayes y fumadas que solía escribir aquí pero les tengo noticias; por el momento no escribiré

!!!

…

…

… cosas interesantes ni sustanciosas ni profundas, simplemente seguiré escribiendo mamadas que es lo que mejor se me da.

Eso si, las escribiré cuando mi oficial de libertad condicional (llamémosle el señor que se dedica a firmar los cheques para mí  y mis subalternos ) no este mirando.

Pues pasando a lo anterior, les decía que mi antigua forma de esclavitud esta evolucionando a formas mas sofisticadas de ella misma, es por así decirlo una mutación mas chingona, como los isótopos del uranio, las nuevas cepas del SIDA, los nuevos senos de Federica Peluche, o la evolución de la evolución del Pikachú.  En este párrafo y antes de pasar al siguiente cabe destacar que mis nuevas tareas me impiden pasar mis habituales 15 minutos en los sanitarios de la compañía en donde me hacen el favor de decir que trabajo, entregándome a la ardua tarea de la catadura de cigarrillos de varias clases con y sin golpe,  conversaciones telefónicas de alto octanaje con mi papazorro, “bitching” de segundo y tercer grado con la “chismizcolera-number-one” de la Compañía, y hasta el ocasional ‘Coyotito’ de los lunes.  

Ahora tengo tres minutotes para ir al baño y regresar a mi escritorio; lo cual escogí como segunda opción pues la primera era que me instalaran una bacinica en una de las esquinas de mi oficina para maximizar mi rendimiento, aumentar mi productividad, ahorrar agua y suministros. Lo cual me obliga a correr escaleras abajo mientras me bajo los calzones al llegar al penúltimo escalón e ir pujando en cuanto cruzo el umbral de tan sacro recinto para no bajar mi estándar de productividad.

Pero no se me desavalorinen que ya encontraré la manera de mantenerlos informados de mis actos mas licenciosos y mis perniciosos hábitos con la periodicidad otrora acostumbrada.

Les mando un a ellas Abrazo y a ellos un Caracolazo!

Bienvenidos Sean de Nuevo a las crónicas de mi vidorria de perro Azul y que sea lo que San Bill Gates quiera!